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¿Cómo preparar el autentico y verdadero alioli? y ¿Es saludable para los ancianos?

¿Es saludable el ali oli para personas mayores y ancianos?

El auténtico alioli es una elaboración típicamente española. Se puede encontrar una falsa versión de esta salsa, consistente en una forma de mahonesa con ajo. Este tipo de salsa es más frecuente en los establecimientos hosteleros de todo el país. Sin embargo, la auténtica salsa alioli no incluye huevos. Como su nombre indica, sólo contiene ajo y aceite. “Al i oli”. Esta forma de hacer la salsa es un poco más complicada que la versión con huevo, pero sigue siendo bastante sencilla.

La preparación artesanal de un alioli sin batidora requiere sobre todo “buena mano” y paciencia. En teoría, es muy sencillo de hacer, pero el secreto está en emulsionar adecuadamente el aceite en un mortero con movimientos regulares y lentos de la mano.

El aïoli es una salsa espesa y rica en sabor, cuyo ingrediente principal es el ajo, que se utiliza en muchas recetas. Aunque se puede degustar en casi toda España, es típico de Cataluña y Levante.

El consumo de esta sabrosa salsa aporta al organismo la vitamina C y ciertos minerales como el yodo y el calcio que contiene el ajo, además de las propiedades beneficiosas del aceite de oliva.

Sin embargo, las personas mayores deben consumirlo con moderación, ya que tiene un alto contenido calórico (100 gramos pueden representar entre 600 y 700 kcal).

El secreto del alioli casero

Hay varias recetas para hacer esta salsa, que se pueden adaptar a diferentes paladares. Para la preparación tradicional, se necesita un buen mortero (que no sea “de antes” para que fluya mejor), aceite de oliva, aunque también está delicioso con aceite de girasol, que le da un sabor más suave; unos dientes de ajo y unos granos de sal gorda.

La cantidad de ajo depende del papel que quieras que desempeñe en tu alioli. Dos o tres clavos son más que suficientes para resaltar su sabor.

En primer lugar, hay que pelar los ajos y molerlos en un mortero con granos de sal. Hay que molerlos muy bien para que no se impregnen demasiado en la salsa.

Cuando el ajo esté listo, es el momento de añadir el aceite. Debes hacerlo muy lentamente. El secreto de un alioli perfecto está en el interior: añadir lentamente y en pequeñas cantidades, removiendo constantemente con el mortero. Añadir el aceite, removiendo constantemente mientras el primer aceite empieza a emulsionar y espesar.

Esto es todo lo que hay que hacer. No se pueden determinar las cantidades exactas. Verás que el alioli va tomando forma a medida que vas añadiendo el aceite, hasta alcanzar la textura compacta, suave y cremosa que requiere la salsa.

Aunque esta es la receta tradicional, el alioli admite muchas variaciones. Si tienes poco tiempo, puedes hacer una mayonesa tradicional con aceite y huevos en una batidora, añadiendo unos dientes de ajo para darle ese inconfundible sabor aioli.

 

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